La-salud-motiva-la-accion-positiva
A través de los años cada vez más familias se volvieron dependientes de la tierra. La gente empezó a cultivar en áreas que realmente no se debía cultivar. El bosque desapareció. Se produjeron deslizamientos de tierra e inundaciones. La escasez de agua se convirtió en el principal problema. Hubo muchos proyectos de ONGs de la ciudad activas en nuestra región para ayudar a mejorar la situación. Pero para nosotros los simples aldeanos no era fácil ver los beneficios. Éramos pasivos, pensando que ese era nuestro destino. Entonces, un día nos dimos cuenta de que lo que estaba en juego era la salud de nuestros hijos y de nosotros mismos. Nuestra agua potable no estaba limpia, y todos creíamos que estábamos perdiendo nuestra agua porque no estábamos cuidando adecuadamente nuestros bosques. Ese fue el momento en que me puse activa.
En Oxtoyahualco, los campos que rodean los manantiales eran de propiedad privada, pero como era la comunidad la que estaba realmente a cargo de ellos, llamé a los dueños y les pedimos que cedieran los campos. Para beneficio colectivo, se decidió que cercarlos y plantar árboles en lugar de maíz. También se decidió dejar de cortar árboles. Las decisiones se tomaron por la Asamblea General en la casa comunal, con las autoridades agrarias. Mi siguiente paso fue conectar con las ONG’s que estaban ayudando a las comunidades a formar grupos de usuarios auto-organizados. Hemos mapeado nuestra área y a partir de lo que sabíamos de nuestros mayores y de otras comunidades, hicimos planes de trabajo para nuestra cuenca. Organizamos talleres y cursos de capacitación; tuvimos el apoyo técnico de las ONG’s y podíamos presentarles proyectos para financiar mejoras técnicas.
Ahora estamos mejorando el bosque de nuevo, nos involucramos en una serie de medios de vida alternativos y de manejo del suministro de agua. Los proyectos que hemos construido se han decidido en la Asamblea, aquí en la comunidad. De esta manera decidimos entre todos. Los técnicos de las ONG’s vienen, pero no deciden por nosotros. Ellos dicen: “¿Dónde quieres construir?” Y nosotros decidimos dónde se hará. Vamos al lugar donde creemos que se debe construir y todos lo vemos: ‘¿es un buen lugar? De esa manera, todos discutimos el tema, y como ya sabemos en dónde están nuestros manantiales, podemos tomar esas decisiones entre todos en una asamblea con la mayoría de los ejidatarios. Yo hago todo el trabajo extra por mis hijos. Y al hacerlo, yo me educo a mí misma”.
El Grupo de Estudios Sociales y del Medio Ambiente, una ONG mexicana es uno de los ganadores del Premio Ecuatorial en el 2012. Volvemos a contar la historia no desde la perspectiva de la ONG ganadora de varios premios, sino desde la perspectiva de uno de los beneficiarios del proyecto: un miembro de un grupo de mujeres. El caso se describe en: Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo. 2013. Grupo de Estudios Sociales y Ambientales, México. Iniciativa Ecuatorial Case Study Series. Nueva York, NY.